Es la mala visión en un ojo que no desarrolla su capacidad normal durante la primera infancia. En ocasiones, es llamada ‘ojo perezoso’. Dos o tres de cada 100 personas la padecen y el mejor momento para corregirla es durante la infancia o niñez temprana. Los recién nacidos ya tienen la facultad de ver claramente, pero a medida que usan sus ojos en los primeros meses de vida la visión mejora. Durante los años de la primera infancia, el sistema visual cambia rápidamente y la vista continúa desarrollándose. Las personas con ambliopía en un ojo tienen más del doble de probabilidad de perder la visión en el ojo sano, debido a un trauma. Si la vista en un ojo se pierde a causa de un accidente o una enfermedad, es esencial que el otro tenga una visión normal.
AMBLIOPÍA
¿QUÉ ES?
SÍNTOMAS
Algunos de los síntomas en niños, que deben tomarse en cuenta, son:
● Mala visión en un ojo o visión deficiente en general.
● La acción de entrecerrar los ojos, inclinar la cabeza o cerrar un ojo para ver.
● Una percepción de profundidad baja (dificultad para juzgar distancias relativas entre
los objetos).
● Un ojo desviado hacia afuera o adentro.
● Dolores de cabeza.
FACTORES DE RIESGO
La ambliopía es causada por cualquier tipo de condición que afecte el uso normal de los ojos y el desarrollo visual. En muchos casos, puede ser hereditaria o transmitida a través de la familia. Existen tres causas principales:
Estrabismo (ojos desalineados)
La ambliopía se produce con mayor frecuencia cuando hay estrabismo, una condición por medio de la cual los ojos están desalineados o cruzados. El ojo cruzado se ‘apaga’ para evitar una visión doble y el niño utiliza únicamente el mejor ojo. Como resultado, el que se encuentra mal alineado no desarrolla una buena visión.
Foco desigual enfoque y errores refractivos
Los errores refractivos son afecciones oculares que se corrigen por medio del uso de anteojos o lentes de contacto. La ambliopía se produce cuando un ojo se encuentra fuera de foco, debido a miopía, hipermetropía o astigmatismo.
Nubosidad en los tejidos del ojo
Las enfermedades de los ojos, tales como cataratas (opacidad del cristalino del ojo, el cual es normalmente claro), generan una ambliopía. Cualquier factor que impida que una imagen clara pueda ser enfocada sobre la retina en la parte posterior del ojo, lleva al desarrollo de la ambliopía en un niño. A menudo, es la forma más grave de la ambliopía.
TIPOS
Ambliopía estrábica
El estrabismo es la causa más común de la ambliopía. Con el fin de evitar la visión doble, ocasionada por una alineación deficiente de los ojos, el cerebro ignora la información visual que proviene del ojo desalineado, generando ambliopía en dicho órgano (‘ojo vago’).
Ambliopía refractiva
También conocida como ambliopía anisometrópica. Algunas veces, la ambliopía es causada por errores refractivos desiguales en ambos ojos, a pesar de una alineación perfecta en ellos; por ejemplo, quizás un ojo esté corregido de forma adecuada y el otro no. En estos casos, el cerebro depende del ojo que tenga el menor error refractivo sin corregir y deja de ‘prestar atención’ a la visión borrosa del otro, lo que provoca ambliopía en dicho ojo, debido a la falta de uso.
Ambliopía por deprivación
Se trata del ‘ojo vago’, provocado por algo que obstruye la entrada de la luz para enfocarse en el ojo de un bebé, como, por ejemplo, la catarata congénita. Para lograr un desarrollo visual normal es necesario un tratamiento sin demora de las congénitas.
DIAGNÓSTICO
No es fácil reconocer la ambliopía (ojo perezoso) en los niños. Un pequeño puede no ser consciente de tener un ojo más fuerte y otro más débil. A menos de que tenga un ojo mal alineado u otra condición que sea visible, no hay manera de que los padres descubran si algo no está funcionando apropiadamente. La ambliopía es detectada al encontrar una diferencia en la visión entre ambos ojos, o una visión deficiente en ambos. Ya que es difícil medir la visión en los niños pequeños, muchas veces el oftalmólogo realiza una estimación de la agudeza visual al observar qué tan bienun bebé sigue objetos con un ojo, cuando el otro está cerrado. A través de una serie de pruebas, el especialista diagnostica ambliopía al analizar cómo un recién nacido reacciona cuando un ojo está tapado. Si un ojo resulta ambliópico y el otro ojo sano es cubierto, el bebé puede intentar mirar alrededor del parche o tratar de quitárselo.
TRATAMIENTO
Si existe una ambliopía refractiva, los lentes pueden ser prescritos al principio para corregir errores de enfoque. Si los lentes por sí solos no mejoran la visión, se establece un tratamiento con parches para obligar al niño a utilizar el ojo débil. Otra técnica usada para lograr el mismo objetivo, es hacer borrosa la visión del órgano fuerte mediante gotas especiales, o un par de anteojos con un lente borroso en el ojo más fuerte. La ambliopía es tratada generalmente antes de proceder a una operación para rectificar los ojos mal alineados o cruzados, y los parches o las gotas que hagan la visión borrosa continúan usándose después de la intervención. Si el oftalmólogo encuentra un trastorno de cataratas u otro tipo de alteración en el ojo que está causando el problema visual, una cirugía puede ser necesaria para corregir lo que está ocasionando la ambliopía.
Fuente: American Academy of Ophthalmology