Las alergias de los ojos, llamadas conjuntivitis alérgicas, son una condición común que ocurre cuando los ojos reaccionan a algo que les irrita (alérgeno); éstos producen una sustancia conocida como histamina para combatir dicho alérgeno.
Como resultado, los párpados y la conjuntiva, que es la membrana delgada que recubre el interior de los párpados y la parte blanca del ojo (esclerótica), se tornan rojizos e hinchados, produciendo comezón, lagrimeo y ardor. A diferencia de la bacteriana o viral, la conjuntivitis alérgica no se transmite de persona a persona.
Los síntomas más comunes son:
● Enrojecimiento de los ojos, hinchazón o comezón.
● Ardor o lagrimeo.
● Sensibilidad a la luz.
Los alérgenos son la causa de este tipo de molestias oculares y puede variar en cada caso.
Algunos de los más comunes son:
● Polen de césped, árboles y ambrosía.
● Polvo.
● Caspa de las mascotas.
● Moho.
● Humo.
● Perfumes.
● Cosméticos.
● Fármacos.
A veces, los ojos pueden reaccionar a otros alérgenos que no necesariamente entran en contacto directo; por ejemplo, ciertos alimentos, mordeduras o picaduras de insectos. Algunas personas heredan alergia en los ojos de sus progenitores. Es más probable sufrir una alergia si ambos padres la tienen.
El oftalmólogo examinará los ojos empleando un microscopio con lámpara de hendidurapara verificar si existen signos de alergias oculares, tales como hinchazón de los vasos sanguíneos en la superficie del órgano. Si las alergias son graves o no está completamente claro que se tiene conjuntivitis alérgica, el médico puede optar por la prueba para el tipo específico de células blancas de la sangre (llamadas eosinófilos), que aparecen en las zonas del ojo donde se presenta una reacción alérgica a algo. Dicho estudio se practica raspando suavemente una pequeña área de la conjuntiva y con el análisis de este tejido para eosinófilos.
Evita los alérgenos
Si el polen es un alérgeno para ti, evita salir al aire libre tanto como sea posible cuando los índices estén más altos y el viento sople con fuerza. Si te encuentras fuera, el uso de anteojos o gafas de sol puede ayudarte a prevenir que el polen entre a los ojos.
Lágrimas artificiales
Evitan alergias oculares temporalmente, limpiando los alérgenos de los ojos; además, alivian la resequedad e irritación, proporcionando humedad. Las lágrimas artificiales están a tu disposición sin prescripción médica y pueden ser utilizadas las veces que sean necesarias.
Descongestionantes (con o sin antihistamínicos)
Reducen el enrojecimiento de los ojos producido por alergias. Pueden ser vendidos simplemente como descongestionantes o con antihistamínicos, que alivian la comezón ocular. Este tipo de gotas no debe utilizarse por más de dos o tres días, ya que a largo plazo aumenta los síntomas de irritación.
Antihistamínicos orales
Pueden ser de utilidad para disminuir la comezón; sin embargo, provocan resequedad en los ojos secos e incluso empeoran los síntomas de alguna alergia ocular.
Antihistamínicos/estabilizadores de mastocitos.
Son gotas para los ojos con un antihistamínico que estabiliza los mastocitos (células cebadas), previniendo las alergias. Se usan dos veces al día para aliviar comezón, enrojecimiento, lagrimeo y ardor.
Corticosteroides
Son gotas de esteroides que ayudan a tratar los síntomas alérgicos del ojo, crónicos y severos, tales como comezón, enrojecimiento e hinchazón.
Inmunoterapia con inyecciones
Si los síntomas no son controlados evitando alérgenos o empleando gotas para los ojos y medicamentos, la inmunoterapia (vacunas antialérgicas) puede ser una opción para el alivio de las alergias oculares. Por medio de la inmunoterapia, recibes vacunas con dosis muy pequeñas de alérgenos, las cuales van aumentando progresivamente para que el cuerpo se vuelva inmune a estas sustancias.
Fuente: American Academy of Ophthalmology